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Antropomorfo de Hornos de la Peña. Foto: EFE/ Pedro Puente Hoyos

Pues sí, así de duro es el título de este artículo. Y es curioso que solo me vaya a centrar en estos últimos 4 años (podría incluso resumirlo en estos dos últimos) donde nos han intentado vender un Plan Estratégico del Arte Rupestre que tapa otras vergüenzas como las que veremos a continuación. Siempre las mismas personas, siempre los mismos focos, siempre los mismos planes (que no dejan de ser papel mojado). Y mientras tanto, donde queremos vender la magnificencia de un turismo prehistórico y ser la "mini-Francia" de turno, nadie nos cuenta que en estos últimos 70 años estamos destruyendo todo aquello por lo que lucharon los Henri Breuil, Alcalde del Río o Saenz de Sautuola entre otros. Todo por posicionarnos como potencia nacional e internacional (en lo personal y autonómico) a costa de perder dinero…y prehistoria.

Un cálculo muy rápido nos dice que en las 7 cuevas visitables de Cantabria (Chufín, Covalanas, Las Monedas, el Pendo, El Castillo, Cullalvera y Hornos de La Peña) pueden entrar alrededor de 235.000 personas año como máximo. Es tan sencillo como multiplicar las personas por sesión, las sesiones al día y los días al año abiertas). Si de esas personas el 80% son adultos y el 20% son niños (me juego una caña a que el porcentaje es de más niños), en entradas salen unos 638.000€ al año.

Aquí, siendo muy optimistas, más de la mitad se va en sueldos y la otra mitad en parte de los suministros y mantenimiento de las mismas…¿Dónde está el beneficio? ¿En la imagen de Cantabria?. Ahhhhh, en lo generado alrededor de las mismas (restauración, alojamiento, capilaridad turística). ¡Fantástico!...¿y dentro de 30 años? ¿Qué quedará de esa sobreexplotación de las cuevas?. Claro, como ya no estaremos va dando igual que legislatura tras legislatura se dañe lo que costó miles y miles de años encontrar, ya hemos ordeñado la vaca cuando nos tocaba.

En este sentido, quien quiera descargar la responsabilidad sobre los guías NO lo está haciendo nada pero nada bien. Yo no lo voy a hacer. ¿Alguien se ha planteado que esas cuevas deberían de estar cerradas y punto?. ¡Ahhhh! Es verdad, es más fácil no repensar el turismo cultural en Cantabria (con cientos y cientos de espacios abiertos) y echarle la mierda encima a quienes tratan de enseñárnoslo con todas las dificultados del mundo. Mi más sincero respeto para su labor por lo mal que está reconocida y remunerada, con la responsabilidad que entraña que 235.000 personas al año no toquen o dañen nuestro Patrimonio de la Humanidad.

Os dejo con un resumen de lo que ha pasado esta legislatura y nadie se ha atrevido a contarte. A mí si fuese Director y no estuviese solo preocupado por mi proyecto o por tapar estas historias, se me caería la cara de vergüenza. Lo difícil (y poco populista) en este caso sería decir que las cuevas se cierran y que existen otras maneras de interpretar el turismo prehistórico y que SI es posible, a costa de invertir de verdad en un futuro no ligado a los siguientes 4 años. Pero ahí se acaba la gallina de los huevos de oro para algunos. Siempre podríamos decir que visiten el Centro de Interpretación del Arte Rup…¡ahhh! que es papel mojado, o la nueva sede del Museo de Prehistoria y Ar…¡Ahhh! que también lo es.

 

Garra de osezno de las cavernas afectada (entre otras) Empezamos por daños más aberrantes. ¿Sabías que se ha dañado el antropoformo de Hornos de La Peña? Pues sí. Si ya olía raruno el tema de la pasarela que habían instalado en su interior para "proteger" un grabado (y exponer otro), y que según parece ahora van a quitar, ahora llega el episodio más preocupante: La famosa figura, de época Magdaleniense, ha sido rayada en alguna de las visitas sin que se haga público. En este caso, como hay un hermetismo enorme en torno a esta cueva (nadie se ha pronunciado públicamente sobre la pasarela ni sobre esto), no se sabe si el daño es mayor/menor, si bien es cierto que se habla de un único rayón. Según parece, ha sido previa instalación de la propia pasarela, quedando "cerrada" esa parte de la visita sin motivo aparente. Ahora está claro el motivo, ya que es más que probable que alguien pidiese responsabilidades y volviese a argumentar que esa cueva no debería estar abierta…todo por 12.000 cochinos € al año que da en entradas. Repito, quien derive la responsabilidad integra en el/la guía se equivoca completamente.

Cueva de Sopeña

Esta cueva, sin arte rupestre conocido y hoy cerrada al público, es conocida entre otras tantas cosas por la gran cantidad de oseras en su interior. El Oso de las Cavernas fue uno de sus moradores hace miles de años, y allí dejó sus huellas en infinidad de rincones. Incluso como las que vemos en la imagen, de pequeños oseznos que al “trepar” a sus oseras dejaron esta bella impronta…hoy destruida. En algún momento entre 2017 y 2018 estas “garras” y otras tantas han sido destrozadas por algún desalmado, quedando ya en el recuerdo fotografías como esta. Evidentemente, los visitantes somos los primeros que debemos de tener la responsabilidad y el respecto que todo esto merece..pero no todos somos así. En las cuevas, la conservación debe primar sobre todo aquello que quede expuesto a las manos de cualquiera.

Estado del yacimiento de Monte Castillo

Cueva de Chufín

Son varias las personas que han alertado ya del desgaste y deterioro (hongos incluidos) de algunas de las pinturas de la cueva de Chufín. Evidentemente esta circunstancia también ha sido notificada a la consejería/director de turno, pero seguimos con las visitas. El mensaje parece bastante claro: Las pinturas de la pared izquierda, las que se creen han sido interpretadas como vulvas, están en un estado deplorable. La gente que las ha visto dice que si las ves en fotografías de hace 25 y las ves ahora..da pena absoluta. Todo eso unido a que hay momentos del año (textualmente) donde diferentes personas nos han “alertado” de que parar llegar hay que pasar por algún lugar donde hay vacas, llegando hasta la cueva con boñigas hasta los tobillos. El slogan será “Vive el turismo rural al máximo”. En este caso, si haces el cálculo, por unos 7.500€ de facturación en entradas al año.


Cuevas del Monte Castillo

Y para terminar, una de las joyas de la corona..el Monte Castillo. Si visitas hoy la cueva de El Castillo, encontrarás un yacimiento de tono “verdoso” que en un punto puede llegar a tener su encanto color esmeralda. Pero nada más alejado de la realidad. Este “verdín” que está proliferando por todo el yacimiento (y que se puede apreciar también en algunas de las luces del interior) es debido a que en el cambio de la cubierta/carpa acometida en Noviembre de 2017, algún lumbreras decidió que tenía que tener mayor luminosidad…y mira tu por donde. Callado está dicho que se sigue insistiendo en que las vibraciones de las minas del Monte Dobra afectan al yacimiento y nadie hace nada. De la plaga de ratas en la cueva de Las Monedas de 2018 ya ni hablamos..con lo bonito que es ver arte rupestre con estos estos simpáticos animalillos.